La conducción de la iglesia católica emitió un comunicado este viernes en el que criticó al Gobierno por su política social y advirtió sobre el peligro que puede significar el avance del narcotráfico: “La pandemia silenciosa del narcotráfico”.
“En el actual contexto económico y social argentino, es fundamental sostenernos en esa alegría, una alegría profunda y duradera, la que nace del encuentro con el Señor. Es una alegría que nos libera de la desesperanza y del desaliento, evitando transformarnos en profetas de calamidades que sólo desparraman pánico y angustia”, sostuvieron al inicio de la carta los referentes de la iglesia en el texto.
En ese orden, añadieron que «a muchos abuelos y abuelas se les presenta el drama de elegir entre comer o comprar los medicamentos porque la jubilación no alcanza», a la vez que «cierran comedores comunitarios por falta de asistencia y muchos vecinos se quedan sin la posibilidad de esa comida en el día».
Para la Iglesia, » se ataca sagrada vida de millones de niños y niñas ya nacidos que se debaten entre la miseria y la marginación; asistimos a la discontinuidad de políticas públicas de integración de barrios populares, logradas con el consenso de gobiernos de distintos signos políticos y representantes legislativos; también familias despojadas de su tierra natal en beneficio de intereses económicos».
Con estas definiciones, la Iglesia retomó las críticas que viene planteando al gobierno de Javier Milei, principalmente por la política en materia de asistencia social, donde hasta ahora las organizaciones sociales y piqueteras tenían un rol central, pero que Sandra Pettovello, la ministra de Capital Humano, decidió desplazar de la distribución de la ayuda a los sectores más vulnerables. El Episcopado sólo tuvo una reunión, el 12 de marzo pasado, con el presidente Milei en Casa Rosada. Allí, el primer mandatario escuchó a los obispos de la Conferencia Episcopal y delegó en esa funcionaria la atención de las demandas y reclamos.



