El deterioro alarmante en la calidad de vida de quienes deberían estar más protegidos, no vuelve a reflejarse en la realidad. La pobreza en Argentina golpea cada vez más fuerte a estos sectores, como los jubilados. Según un informe del Instituto Gino Germani (UBA) y el CONICET, la tasa de pobreza en este grupo etario alcanzó el 30,8% en el primer semestre de 2024, duplicando la incidencia registrada un año atrás.
El estudio revela que más de 542 mil jubilados cayeron en la pobreza en los últimos meses, lo que representa un aumento de 17,6 puntos porcentuales respecto al 13,2% registrado en 2023. Los investigadores destacan que, aunque las personas mayores de 65 años suelen ser el grupo con menor incidencia de pobreza, las condiciones económicas actuales han deteriorado su calidad de vida.
En los datos se puede observar un crecimiento significativo en la proporción de pobres “pese a que los mayores de 65 años representan el tramo etario con menor incidencia, los jubilados se están viendo afectados por un significativo aumento de la pobreza en el último año”.
El informe también analiza el impacto de la pobreza en trabajadores asalariados formales, donde la incidencia creció del 18,1% al 27,8% en solo seis meses. Estos datos desmienten la creencia de que la pobreza afecta exclusivamente a sectores informales o precarios.