Concluyó el segundo fin de semana largo de junio y la actividad turística mostró una fuerte retracción del gasto. Según el relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), durante los dos feriados del mes se movilizaron 2.162.750 turistas, con un gasto total de 412.372 millones de pesos. A precios constantes, la cifra representa una caída interanual del 29,6%.
De acuerdo con el informe, el principal ajuste no fue en la cantidad de turistas, sino en la duración de las estadías. En promedio, cada viajante permaneció 2,2 noches en destino, frente a las 2,9 noches del mismo período en 2023. También hubo una reducción marcada en consumos vinculados a actividades recreativas y compras.
Las 24 provincias desplegaron propuestas culturales, gastronómicas y patrias para atraer visitantes. Sin embargo, el contexto económico condicionó el consumo en muchos destinos. En ese marco, el turismo de cercanía fue el que mostró mejor rendimiento.
La preferencia por viajes de corta distancia, con menor costo de traslado, permitió sostener algunos picos de ocupación en lugares que ofrecieron eventos masivos. Entre las experiencias destacadas figuran el turismo rural en Lobos, la Fiesta Nacional de la Noche Más Larga en Ushuaia y el regreso del Turismo Carretera a Misiones.
Desde CAME indicaron que cada provincia apostó a mantener su posicionamiento en la agenda turística nacional, fortaleciendo sus propuestas para escapar del ajuste sin salir del mapa.