Watson evocó “el legado del Santo Padre, quien siempre reflejó la humildad de un grande”. “Hasta el último momento, demostró una entrega absoluta hacia su vocación. Una tarea incansable en pos de las personas más vulnerables y excluidas” y agregó, “un servidor que abrió las puertas de la Iglesia y llamó a la juventud a ‘hacer lío’ para conformar una institución más dinámica, que saliera a las calles”.
Además Matias Aguirre, concejal de Berazategui, también participó de la ceremonia religiosa y expresó en sus redes «Gracias por caminar con los pies en el barro, por escuchar el llanto escondido tras las grietas, por no soltar la cuerda cuando el abismo arañaba. Tu voz, ahora semilla, se queda en el viento: Seguimos alzando la bandera de tierra, techo y trabajo contra la indiferencia».
Mayra Mendoza, intendenta de Quilmes, luego de la misa por el descanso del Papa argentino anheló: «Junto a un pueblo que llora a Francisco, pero que también mantiene viva la esperanza en todo lo que su papado reparó y dejó como legado para que nadie pueda deshacerlo».
Por su parte, Tissera habló de “un hombre de una sola pieza, coherente, que vivió lo que creyó, predicó con sus palabras, pero también con sus gestos”.
El prelado definió al máximo referente del credo católico como alguien “involucrado con la vida de la sociedad desde la mirada del pastor en cuidado de su rebaño”.
En tanto, el representante de la Iglesia Reformada Argentina en Quilmes –Timoteo Van Benthem– consideró al “testimonio de Francisco” uno “de fe, un ejemplo a seguir” para “encontrarnos en el camino del Evangelio”.