El Gobierno nacional enfrenta una ola de críticas tras las declaraciones del presidente Javier Milei en el Foro Económico de Davos, donde vinculó la homosexualidad con la pedofilia, generando un fuerte rechazo por parte de colectivos LGBT+ y sectores feministas. Ante este panorama, el vocero presidencial, Manuel Adorni, salió a intentar suavizar las declaraciones en su primera conferencia de prensa en un mes.

«No, la homosexualidad no implica ser pedófilo. Obvio«, respondió Adorni ante la consulta directa de periodistas, quienes dedicaron la mayor parte de las preguntas a este tema. Desde la Casa Rosada, buscan minimizar el impacto del discurso, afirmando que no existe animadversión hacia las diversidades. «Milei no odia a los gays«, aseguró una fuente cercana al mandatario.

El sábado próximo, se espera una marcha masiva en repudio a estas declaraciones, bajo el lema «antirracista y antifascista«, que partirá desde el Congreso hacia Plaza de Mayo. Aunque desde Balcarce 50 afirman no estar en contra de la movilización, el oficialismo no participará de la misma.

El discurso en Davos, que habría sido redactado íntegramente por el asesor presidencial Santiago Caputo, ha derivado en denuncias judiciales contra el presidente por incitación al odio, intimidación pública y abuso de poder. Entre los denunciantes se encuentra el diputado socialista Esteban Paulón, quien expresó en sus redes sociales: «Denuncié penalmente a Milei porque nuestras vidas importan y no vamos a tolerar discursos que generan violencia«.