El Gobierno envió al Congreso el proyecto de Ley Hojarasca, la cual tienen como objetivo “derogar costos inútiles para los contribuyentes y normas que afectaron las libertades individuales”. Se trata de una iniciativa que busca eliminar 70 leyes, que fueron sancionadas por distintas administraciones durante el siglo XX, principalmente.
El propio Sturzenegger se encargó de anunciar que Javier Milei envió el proyecto en cuestión al Congreso para que inicie el trámite legislativo. Según anticipó, el documento deroga 75 leyes «inútiles, obsoletas o que restringen nuestras libertades» del sistema jurídico argentino. Vale aclarar que, hacia la primera mañana de este lunes, la iniciativa no había ingresado formalmente.
A la espera de mayores precisiones, la cartera de Desregulación dio a conocer algunos ejemplos y un gráfico que muestra a qué presidencias corresponden las normas a eliminar. Según esa ilustración, la mayor cantidad (más de cinco) corresponde al periodo 1974-1976 que gobernó Isabel Perón.
- Isabel Perón (1974-1976): 5 leyes
- Alejandro Agustín Lanusse (1971-1973): 5 leyes
- Reynaldo Benito Bignone (1982-1983): 5 leyes
- Héctor José Cámpora (1973): 3 leyes
- Juan Carlos Onganía (1966-1970): 3 leyes
- Carlos Menem (1989-1999): 3 leyes
- Raúl Alberto Lastiri (1973): 3 leyes
- Jorge Rafael Videla (1976-1981): 5 leyes
- Arturo Frondizi (1958-1962): 3 leyes
- Néstor Kirchner (2003-2007): 3 leyes
Desde la cartera que conduce Federico Sturzenegger señalaron que el Gobierno de Milei realizó «un análisis detallado de las leyes argentinas y encontró seis motivos para la derogación de diferentes normas»:
- Leyes que limitan la libertad individual y restringen el derecho de propiedad.
- Leyes que eliminan trámites inútiles y sin sentido.
- Leyes que fueron superadas, actualizadas y mejoradas por otras leyes posteriores.
- Leyes que en la actualidad son obsoletas por los cambios tecnológicos.
- Leyes que dejaron de tener sentido porque definían obligaciones para instituciones que dejaron de existir.
- Leyes que crean organismos con financiamiento público cuando deberían solventarse a sí mismos.