9 noviembre, 2025
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Buenos Aires

El Gobierno reconduce fondos para pagarle a la Ciudad la coparticipación, pero se los quita a las provincias

La batalla discursiva y económica que encaró el Gobierno de Javier Milei contra las provincias argentinas quedó expresa en la caída de la coparticipación, algo que desde la Provincia de Buenos Aires cuestionaron con dureza, dado que impacta, a la vez, en los estados municipales.

El primer frente de conflicto fue el monto de coparticipación destinado a CABA, tema que viene de larga data. En 2016, el entonces presidente Mauricio Macri incrementó de 1,40% a 3,75% los recursos que llegaban desde Nación a Ciudad. En 2020, en un contexto de rebelión policial y protestas de gobernadores, Alberto Fernández firmó un decreto para reducir a 2,32% el coeficiente de coparticipación a la CABA. Esto provocó una demanda ante la Corte Suprema de Justicia y, tras un período de conciliación, el máximo tribunal dictó una medida cautelar en la que ordenó llevar el coeficiente a 2,95% hasta resolver definitivamente la cuestión de fondo. Esta disposición fue incumplida tanto por Fernández como por el propio Milei.

Cabe destacar que la Ciudad de Buenos Aires es la jurisdicción que menos fondos recibe de Nación en proporción a sus ingresos: apenas el 16,4% del total (según datos de 2022). Al mismo tiempo, cuenta con una gran autonomía puesto que el 77% de sus ingresos proviene de recaudación propia y el 6,6% restante corresponde a otros ingresos propios. De acuerdo con estimaciones del Ejecutivo porteño, la metrópolis dejó de percibir desde el 9 de septiembre de 2020 más de 4,8 billones de pesos.

Según expuso el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, en agosto, la recaudación nacional cayó 14 por ciento, aunque la parte coparticipable «se desplomó aún más», en un 18 por ciento. «La recesión, que no muestra signos de reversión, perjudica más a las provincias y municipios que, además, debemos hacernos cargo de lo que no hace el Estado nacional», agregó el ministro de Axel Kicillof. «Las provincias llevan perdidos $4,7 billones por este efecto desigualador, que deteriora la coparticipación en términos absolutos y relativos», sentenció.

Por eso, marcó que «el Gobierno nacional está dañando las finanzas de provincias y municipios, que dependen en gran medida de la coparticipación» y fustigó al señalar que, en simultáneo, «incumple con sus funciones y acapara recursos no coparticipables; los principios básicos del federalismo están siendo avasallados».