La situación judicial que atraviesa Cris Morena volvió a tomar fuerza luego de que la Justicia confirmara nuevos episodios de hostigamiento por parte de Leandro Lo Giudice, el hombre que la acosa desde hace más de cuatro años. Según se informó, el acusado habría violado nuevamente la restricción perimetral vigente, lo que llevó a reactivar la causa y reforzar las medidas de protección.
En las últimas horas, trascendieron detalles del expediente a partir de los informes de periodistas especializados. Tal como explicó Mauro Szeta, la Justicia dispuso una nueva restricción y la colocación de una tobillera de monitoreo. El imputado ya había atravesado una probation por hechos de acoso previos, pero aun así volvió a acercarse a la productora, lo que agravó su situación procesal.
La escalada del caso quedó más expuesta por lo revelado en programas como Tarde o Temprano y Desayuno Americano. Allí, Pampa Mónaco recordó que el conflicto comenzó en 2020 y que incluso hubo una instancia conciliadora a la que Morena accedió en busca de una resolución. Sin embargo, Lo Giudice reincidió años después, incumpliendo nuevamente las medidas dictadas por la Justicia.
El elemento más inquietante surgió tras el allanamiento realizado en el domicilio del acusado. Según informaron, se encontraron mapas hechos a mano, donde figuraban supuestos recorridos y movimientos habituales de la productora. Además, hallaron anotaciones, recortes, fotos de los ojos de Morena y collages, elementos que darían cuenta de un seguimiento sostenido y de una marcada obsesión.
El entorno de Cris Morena permanece en alerta, ya que no se trata de un episodio aislado, sino de una conducta reiterada a lo largo del tiempo. Con la causa nuevamente activa, la Justicia deberá evaluar los próximos pasos mientras la productora intenta continuar con su vida en un contexto de fuerte presión emocional.



