3 agosto, 2025
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Buenos Aires

Intentó matar a su esposa con un imán y fue condenado a prisión

Un hombre fue condenado a 13 años de prisión por haber intentado asesinar a su esposa en dos ocasiones en la ciudad de Córdoba. En uno de los ataques, utilizó un imán con el objetivo de desactivar una válvula cerebral que la mujer tenía implantada tras una intervención quirúrgica.

La sentencia fue dictada por la Cámara en lo Criminal y Correccional de 5° Nominación, integrada por jurados populares. El acusado, D. N. H., fue declarado responsable de lesiones gravísimas y tentativa de homicidio calificado por el vínculo y por mediar violencia de género, en concurso real.

El calvario comenzó en 2018, cuando el hombre emboscó a su esposa mientras regresaba en moto a su casa y la golpeó con un objeto contundente, provocándole un traumatismo de cráneo severo que la dejó en coma durante varios meses. Para simular un accidente, el atacante planificó la escena como si se tratara de una caída vial.

Tras varias cirugías, la mujer sobrevivió con secuelas. Sin embargo, un año después, en plena rehabilitación, el acusado volvió a intentar matarla: colocó un imán sobre su cabeza para desprogramar la válvula cerebral implantada. “La válvula se va a desprogramar y vos te vas a morir, y nadie se va a enterar”, le dijo, según relataron testigos en el juicio.

El intento falló porque el imán no tenía la potencia suficiente para desactivar el dispositivo. En los fundamentos del fallo, el tribunal describió un patrón de violencia sistemática que incluyó aislamiento, celos extremos y maltratos físicos y psicológicos durante años, incluso hacia los hijos en común.

La pena fue agravada por la extensión del daño causado, no solo a la víctima —quien vive con secuelas neurológicas y bajo tratamiento permanente— sino también al entorno familiar. La condena fue considerada ejemplar por su carácter preventivo en casos de violencia de género sostenida.