29 octubre, 2025
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LA INDUSTRIA ARGENTINA VOLVIÓ A CAER EN AGOSTO: LOS SECTORES MÁS GOLPEADOS

La industria manufacturera argentina mostró nuevamente señales de debilidad en agosto, con una caída interanual del 1,2%, según el último informe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL). El reporte alerta sobre la posibilidad de que el sector esté ingresando en una nueva fase recesiva.

Entre los rubros más afectados se encuentran la producción automotriz, minerales no metálicos y autopartes. En el caso del cemento, los despachos registraron un marcado retroceso interanual, mientras que los sectores que lideraban la recuperación industrial evidenciaron frenos en su crecimiento. Por su parte, alimentos y bebidas moderaron su ritmo, según el relevamiento.

La industria metalúrgica también sufrió retrocesos significativos: el indicador de ADIMRA mostró una caída del 6,1% interanual y del 2,3% respecto a julio. El avance acumulado en 2025 se mantiene en apenas 1,6%, mientras que el sector se encuentra un 17% por debajo de sus niveles históricos máximos, con descensos destacados en autopartes (-12,6%), fundición (-14,4%) y bienes de capital (-8,1%).

El informe de FIEL señala que desde febrero la industria estaría entrando en su fase recesiva número 12 desde 1980, con una caída acumulada del 6% en los últimos meses. Aunque menor al promedio histórico de contracciones, los analistas destacan la debilidad del consumo, la escasa inversión privada y la incertidumbre macroeconómica como factores que dificultan la recuperación.

En términos mensuales y desestacionalizados, la producción mostró un repunte del 1% respecto a julio, interrumpiendo dos meses consecutivos de caída, aunque los especialistas advierten que este rebote no modifica la tendencia general de estancamiento. Otros relevamientos privados, como el de Orlando Ferreres, registraron un crecimiento interanual del 1,7% en agosto y del 2,5% en el acumulado anual, con un avance mensual de 1,1%.

Según estimaciones privadas, la debilidad industrial podría anticipar una recesión generalizada en la segunda mitad del año, impactada por el apretón monetario, las tensiones cambiarias y la incertidumbre política.