A pocos días de las fiestas, las jugueterías argentinas enfrentan el desafío de repuntar ventas tras un año difícil. Aunque el sector acumula dos años consecutivos de caída, las expectativas para Navidad y Reyes Magos son moderadamente optimistas, con un consumo «aceptable» según la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ).
Las preferencias de los chicos este año abarcan una amplia gama de opciones. Desde alternativas económicas como pelotas desde $4.000 o lanzaguas por $4.500, hasta juguetes premium como casas de muñecas y figuras temáticas que superan los $200.000.
La CAIJ estima que el gasto promedio por juguete será de $17.000 en negocios barriales y de $35.000 en cadenas de jugueterías, donde predominan los productos importados (90%). Entre los más vendidos destacan juegos de construcción, muñecas, bebotes, juguetes para el aire libre y clásicos como juegos de mesa.
Los comerciantes esperan que estos productos, tanto económicos como premium, se conviertan en el regalo ideal para niños y niñas de todas las edades, logrando así mitigar parte de las pérdidas acumuladas durante 2024.