Este martes, la consultora Morgan Stanley Capital International (MSCI) mantuvo a Argentina como mercado “standalone” en su última revisión de calificaciones financieras. La decisión representa un fuerte revés para el Gobierno, que esperaba una mejora tras las medidas económicas impulsadas por el presidente Javier Milei.
Argentina continúa excluida de los índices de “mercados frontera” y “mercados emergentes”, y permanece en una de las peores categorías internacionales desde 2021, cuando se reforzaron los controles al mercado de cambios.
Según el informe de MSCI, el país no cumple todavía con los estándares mínimos en cuanto a liquidez, acceso operativo al mercado y marco regulatorio, condiciones que considera indispensables para una eventual reclasificación.
Entre los argumentos centrales, la calificadora remarcó que “no existe un mercado cambiario offshore eficiente” y que, pese a la flexibilización de algunas restricciones por parte del Banco Central en abril, persisten barreras que afectan la operativa de inversores internacionales.
MSCI también advirtió que los controles cambiarios aplicados desde septiembre de 2019 limitaron seriamente el accionar de los fondos institucionales extranjeros, generando incertidumbre sobre la repatriación de capitales.
Actualmente, el índice MSCI Argentina está compuesto por 18 acciones que representan cerca del 85% de la capitalización bursátil local. Este índice sirve como referencia para inversores institucionales y su exclusión afecta negativamente el flujo de inversiones hacia el país.