Este lunes, cinco jugadores del Club Atlético Quilmes se presentaron a trabajar en el Estadio Centenario, a pesar de que la dirigencia busca rescindir sus contratos antes de fin de año. Los futbolistas Iván Ramírez, Juan Cruz Kaprof, Francisco Flores, Maximiliano Padilla y Fernando Torrent realizaron tareas físicas bajo la supervisión del cuerpo técnico.
La medida responde a la decisión del club de no retener a diez jugadores cuyos vínculos vencen en diciembre de 2025, con la intención de reducir gastos en los meses sin competencia. Sin embargo, los futbolistas que no aceptaron la propuesta económica decidieron cumplir con sus contratos y presentarse a entrenar.
Entre los jugadores a quienes se les pidió rescindir figuran Mariano Miño, Mariano Santiago, Enzo Kalinski, Leandro Allende, Edwin Schulz, Gabriel Aranda, Oscar Belinetz y los cinco que ya volvieron al trabajo. Algunos, como Miño y Santiago, ya acordaron su salida; otros, como Kalinski o Allende, tienen charlas avanzadas con la dirigencia.
La firme postura de los jugadores también está vinculada a una deuda salarial de dos meses (agosto y septiembre), mientras el club pretende no abonar los sueldos de noviembre y diciembre. Por eso, los futbolistas afectados decidieron seguir trabajando hasta que finalicen sus contratos, aunque solo realizan tareas livianas en el gimnasio y en los alrededores del campo de juego.



