Mientras intenta consolidarse como partido político en todo el país, La Libertad Avanza tiene cada vez más conflictos internos. Las peleas entre los dirigentes libertarios alcanzó niveles insólitos en Bahía Blanca, donde la policía científica tuvo que allanar el Concejo Deliberante luego de que un concejal denunciara un robo.
La Justicia allanó el Concejo Deliberante esta mañana tras una denuncia del concejal Carlos Alonso por la “usurpación” de su espacio de trabajo por parte de la presidente del cuerpo, María Teresa Gonard y tres nuevos concejales libertarios que ayer ingresaron a su despacho para ocuparlo. Dos oficiales de la Policía Científica llegaron a Sarmiento 12 poco después de las 7 para tomar huellas y examinar el bloque en busca de pertenencias de Alonso, que en su declaración ante la Justicia aseguró haber dejado una costosa birome Montblanc y una cadena de oro.
Envuelta en una guerra interna que se expande a Juntos, Marité Gonard ya no cuenta con el apoyo de algunos concejales que la llevaron a presidir el deliberativo y que, en diciembre pasado, dejaron sin ese sillón al peronismo que responde al intendente Federico Susbielles.
Al consumar la fusión con los concejales alineados a Patricia Bullrich, Gonard no solo impulsó la ruptura del bloque de Juntos (uno de los pocos que se sostenía tras la implosión de la alianza a escala nacional), sino que, además, dejó sin oficina a quien era su colega de bloque, Carlos Alonso.
Ante eso, en las últimas horas Alonso acusó a Gonard de abuso de poder y de incumplimiento de los deberes de funcionario público.
La presentación de Alonso incluyó un pedido de restricción de acercamiento que, de hacerse efectivo, podría complicar el desarrollo de la actividad legislativa. Así las cosas, quedan dos problemas a resolver: la fusión de LLA y el PRO de Bullrich y el supuesto robo en la oficina del concejal bahiense.